domingo, 3 de junio de 2012

Hipócritas

Este tema me surge por hablar el otro día en clase de la corrupción política, pero la corrupción viene de la mentira y el engaño, de mostrarnos de una forma y ser de otra o decir una cosa y que sea otra bien distinta. Pero sobre todo viene de querer más y más, de la avaricia.

Actualmente, de esto no podemos escapar, la mentira, la falsedad y la hipocresía por desgracia abundan, pero ¿por qué somos así?, ¿no es este engaño dañarse a uno mismo y además a terceros?, ¿cómo podemos tener valor para pedir justicia y verdad cuando nosotros mismos no lo hacemos? y ¿no habría que "predicar" con el ejemplo?

Respondiendo a la primera pregunta, creo que somos así por imitación, viviendo en un mundo donde la mayoría de la gente es de esta manera, si eres tú el bueno, el que va a recibir daño eres tú, por eso decidimos imitar a los demás y aprovecharnos como queramos. Pero no veo esto como una buena excusa porque aquí todo el mundo es libre de escoger lo que hace y si mentimos y engañamos no podemos decir que alguien nos ha obligado, lo hicimos porque quisimos. El problema es que no pensamos bien lo que hacemos.

La libertad es el derecho que tiene todo hombre a ser honrado, y a pensar y a hablar sin hipocresía.
José Martí

Lo peor de todo es que con estos engaños lo único que hacemos es dañar al pobre que no es hipócrita y al que es hipócrita también. Pensamos que engañar es algo fácil, nunca pensamos las consecuencias, no entiendo porque siempre estamos tan preocupados por tonterías y en este tipo de cosas que realmente dañan a la gente ni nos inmutamos. 

Un niño de 5 años seguramente no es malo pero cuando crece, aprende de los demás las mentiras y los engaños, pero saber que algo existe y que podemos hacerlo no significa que tengamos que hacerlo. 

Lo mejor es que encima nuestros padres nos digan"sé bueno", "no digas mentiras", "no hagas tal o cuál" y ellos lo hagan, eso es aún más hipócrita. Yo creo que ya que alguien te está criticando tus errores pues al menos que no los tenga ¿no?

Pero es que yo pienso que hay que ser valiente y enfrentarnos a lo que nos venga, porque la vida no siempre es buena ni siempre mala, pero ¿por qué si a mi me viene mal y a otro le va mejor, me tengo que aprovechar de él? Pues no, cada uno nos tendríamos que conformar con lo que tenemos, porque yo no me sentiría bien si tuviera más de lo que merezco, es más no me siento bien porque tengo más de lo que merezco, no es justo que mientras aquí un puñado de personas vivamos en buenas condiciones y pudiendo tener todo lo que queramos y en otras partes haya gente muriéndose de hambre porque unos pocos nos hemos apoderado de todo.

Lo que permite el surgimiento de la hipocresía es la pura debilidad moral y la cobardía. Si ustedes tienen valentía para afrontar las consecuencias, nunca dirán una mentira.
Sathya Sai Baba

Pero al menos lo poco que puedo hacer por ser sincera lo hago, yo prefiero ser yo misma y que me hagan daño, no me vale la pena mentir, no me gusta engañar, me siento mal. No voy a dejar de ser yo y voy a renunciar a mis principios que es no mentir porque todos lo hagan, me da igual lo que consigan los demás, mientras yo me sienta bien conmigo misma. Si hiciera lo que los demás desde luego no podría volver a mirarme en un espejo sin odiarme. 

La vida me ha enseñado que no debo engañarme a mi mismo, y tengo que ser la persona más sincer que puede haber ya que solo así podré sobrevivir en este mundo donde hay tanta gente hipócrita.
Alessandro Mazariegos

La voz interior me dice que siga combatiendo contra el mundo entero, aunque me encuentre solo. Me dice que no tema a este mundo sino que avance llevando en mí nada más que el temor a Dios
Gandhi


En conclusión, no me gusta la hipocresía, ni en los demás ni en mí misma, me gustaría que la gente pensara un poco más en las consecuencias que tendrá sus mentiras o aprovechamiento de los demás, que no se aproveche simplemente porque todos lo hacen, que seamos un poco más nosotros mismos. Nos tendría que importar más quienes somos que lo que tenemos y sólo cuando vemos que nosotros no tenemos un error, reprochárselo a los demás, pero supongo que esto es pedir demasiado, lo único que podemos hacer al menos es intentar ser mejores y no tan falsos y un poco más conformistas, porque tener más no nos da siempre la felicidad aunque creamos que sí.

viernes, 25 de mayo de 2012

¿Hace la rutina que no disfrutemos la vida?


La rutina es tener la costumbre o hábito de repetir las mismas cosas día a día automáticamente y sin darnos cuenta. Siempre asociamos esto con el aburrimiento o el tedio que nos impide disfrutar, pero ¿realmente es así?



No creo que la rutina sea tan mala, en realidad creo que es algo bueno y que nos hace falta.
La rutina es lo que siempre está ahí, es algo seguro y nos da estabilidad, al menos a mí me conforta saber que todos los días voy a salir del instituto a las dos y media, voy a coger el autobús, llegar a casa y allí me estará esperando mi madre con la comida hecha… 

También pienso en la rutina como una manera de facilitarnos la vida, porque nos cansaría bastante tener que estar pensando constantemente qué estamos haciendo, por ejemplo, cuando vamos andando no pensamos, ahora doblo la rodilla y pongo el pie en el suelo, ahora doblo la otra y pongo el otro pie en el suelo… 
Hay rutinas, como las costumbres que forman parte de nosotros mismos, no las piensas porque quizás tampoco te has dado cuenta de que lo hacías, pero tampoco hace falta. Un ejemplo de esto es que de nuestros familiares podemos copiar “inconscientemente” la manera de hacer algo, modales al comer, la manera o expresiones al hablar

Otra demostración de que la rutina es necesaria es que en ocasiones queremos conseguir algo, pero para llegar a ello necesitamos una actividad anterior, como un corredor; si a una persona le gusta correr y quiere ganar carreras tiene que tener unas sesiones establecidas cada semana para entrenar, una disciplina. Eso también se considera una rutina, pero si es lo que le gusta, ¿por qué iba a ser algo malo?



Llegando al quid de la cuestión, yo creo que lo único que tenemos que hacer para disfrutar la vida es hacer lo que nos gusta, siempre y cuando no sea algo perjudicial, ni para nosotros ni para los demás claro está. Pero si lo que nos gusta no es nada malo y disfrutamos además con ello, sí que disfrutaríamos la vida ¿no? Lo que realmente sería desperdiciar tu vida sería hacer algo que no te gusta o que no te vale para alcanzar un objetivo, porque si nos pasáramos toda nuestra vida haciendo algo, que además de ser rutinario no nos gusta, llegaríamos a viejos y estaríamos disgustados con nosotros mismos.

La verdad es que no me gustaría que todos los días fueran diferentes, si en lugar de estar en un lugar estable, viajáramos para tener nuevas experiencias y ver nuevos paisajes cada día, no nos serviría de nada porque no nos íbamos a acordar de ello al igual que tampoco nos acordamos muchas veces de las cosas que hacemos en la rutina.

Además aunque todos los días nos levantemos a las siete, a y cuarto desayunemos, nos vistamos a y media, etc., no siempre nos ocurre lo mismo cada día, hay pequeños momentos, detalles, anécdotas por los que un día va a sobresalir entre los demás, lo va  a hacer diferente.

Ahí está lo bueno, en el contraste, es decir, una mezcla. Tener una rutina de las cosas que te gustan y para no aburrirte de ella que tenga intercalados estos pequeños momentos, situaciones fuera de lo normal o cosas novedosas, es decir que aunque una persona esté trabajando en un trabajo que le gusta con un horario fijo, pues cada tarde haga algo nuevo, que quede con sus amigos o que se vaya de vacaciones… Porque aunque algo te guste si es lo mismo te terminará cansando, así que es mejor tener estas pequeñas pinceladas de diferencia para disfrutar y ser felices. Por ejemplo una canción te puede gustar mucho, pero si solo escuchas esa canción una y otra vez te terminas aburriendo, es mejor la variedad.




Esta cita me parece muy explícita para corroborar lo que estoy diciendo:

“Me aborrecen la aburrida rutina de la existencia. Yo imploro de exaltación mental.”
Arthur Conan Doyle


En conclusión, no creo que la rutina nos impida disfrutar de la vida, para disfrutar de esta tenemos que hacer cosas que nos gusten y que nos hagan felices (aunque sean una rutina) y compaginar estas con otras cosas que no nos hagan caer en la monotonía, nuevas experiencias. Necesitamos la rutina de hecho pero tampoco debemos estar siempre con el “piloto automático” encendido, a todos nos gusta tener nuevas cosas en la vida, porque esto nos ayuda a contrastar las situaciones y a no caer en el aburrimiento.




lunes, 21 de mayo de 2012

Dibujo "¿Soy más libre si controlo mis emociones?

Bueno pues aquí está el segundo dibujo que he hecho de un ensayo, esta vez sobre la libertad o la falta de esta que pueden causar nuestras emociones... En mi dibujo dos personas se dan la mano (simboliza el sentimiento, la emoción o relación que hay entre ellas) y unas esposas que unen a ambas. Os dejo unas fotos.





 

domingo, 20 de mayo de 2012

Dibujo "¿Decimos lo que pensamos?"


Bueno pues esto es uno de los dibujos que me pidió Rafa que hiciera, esta basado en un ensayo de Gloria Zaragoza Vargas que se llama ¿Decimos lo que pensamos? No sé si se verá muy bien pero la chica tiene la boca cerrada con una especie de cremallera, es como un símbolo de que aunque estemos callados en nuestro interior seguimos pensando.